La participación de los trabajadores en las utilidades es un derecho contemplado en la legislación peruana, específicamente en el artículo 29 de la Constitución Política y el Decreto Legislativo N° 892. Su finalidad es distribuir parte de las ganancias empresariales entre los empleados, reconociendo su contribución al éxito de la organización.
Este sistema beneficia tanto a los trabajadores como a las empresas. Para los empleados, representa un incentivo económico adicional, promoviendo la productividad y el compromiso laboral. Para las compañías, mejora el ambiente de trabajo y fortalece la relación con su equipo.
La distribución de utilidades varía según el sector y el número de empleados, aplicándose porcentajes diferenciados conforme a la actividad empresarial. Además, existen normas que regulan los montos máximos y la forma de cálculo, asegurando un reparto justo y equitativo.
