En Perú, elegir el régimen tributario correcto fue una de las decisiones más importantes para todo emprendedor o empresario. Esta elección determinó la carga fiscal, las obligaciones contables y las oportunidades de ahorro tributario que se presentaron. Muchos negocios que se formalizaron entre 2020 y 2024 enfrentaron dudas respecto a si debían acogerse al Nuevo RUS, al Régimen Especial, al MYPE Tributario o al Régimen General.
Cada uno de estos regímenes tuvo condiciones específicas, como topes de ingresos, tipos de actividad económica y obligaciones de emisión de comprobantes electrónicos. Por ejemplo, el Nuevo RUS fue útil para pequeños comerciantes con ingresos bajos, mientras que el Régimen MYPE Tributario benefició a negocios en crecimiento que no superaban los S/1,700,000 anuales.
Aquellos que no analizaron bien su situación terminaron pagando más impuestos de lo necesario o incumpliendo con sus declaraciones. Por eso, fue clave contar con asesoría contable y una comprensión básica del sistema tributario peruano.
En retrospectiva, quienes eligieron correctamente su régimen tributario optimizaron sus recursos, accedieron a beneficios fiscales y facilitaron su crecimiento formal. Esta elección también impactó en su relación con la SUNAT y su historial financiero.